lunes, 31 de agosto de 2009

Seguimiento en coche!!!

Ya sé que es raro, pero nunca había participado en un seguimiento en coche. Son más caros y los clientes los evitan. Simplemente nos dicen donde va a estar el objetivo a una hora determinada y van andando o en transporte público (sobre todo en Barcelona). Por lo general si el objetivo se sube a un coche particular abandonamos porque el cliente no tiene pensado pagar más, es así.

Hoy pensaba que iba a pasar eso. Estábamos siguiendo a un tipo realmente aburrido, no daré más detalles, pero casi ya no sabía a qué hacer fotos, aunque las hacia porque Héctor siempre dice que haga fotos a todo, que todo puede ser importante. De repente el hombre aburrido se para delante de un coche y saca unas llaves. Y yo pensando: aquí nos vamos. Pero Héctor me dice: vamos! Se ha puesto a correr y lo he seguido sin entender muy bien.

Se ve que el cliente ya le había dicho que el objetivo iría en coche y Héctor lo tenía aparcado en la zona de seguimiento. Al principio nos pensábamos que lo habíamos perdido pero, yuju! Lo hemos podido seguir. No diré hasta donde pero... estoy muy emocionada.

Contaré los progresos, este objetivo es súper interesante.


Siempre en tu mente
Coraline

sábado, 29 de agosto de 2009

La ultima comida

Hoy he ido a casa de Marga. Aun está con su plan de fugarse a Italia, de hecho, cuando he llegado allí he intentado hacer caso omiso a la maleta a medio hacer que había en el suelo.

Estaba muy entusiasmada y me ha repetido muchas veces que no tenía por qué preocuparme i que no se iba a olvidar de mi. Yo le he dicho que claro que lo va a hacer i le he vuelto a preguntar que iba a hacer yo sin ella. Es mi mejor amiga! Ojalá se conformara con la vida que lleva, que por cierto no está nada mal.

Ha preparado la comida y no he podido evitar pensar que sería la última vez que cocinaba para mí. Estaba muy triste y creo que no he sabido disimularlo demasiado. Ya sé que soy egoísta... pero no se actuar de otra forma. Espero que si al final no se va (cosa bastante improbable) no me odie por desear tan fervientemente que se quedara. Aunque que conté que no le he puesto baches en la huida. No le he pedido abiertamente que no vaya ni nada por el estilo solo le he dicho la verdad, que me hace penita que se vaya. Pero en realidad es mayorcita para tomar sus decisiones i no puedo ni quiero (aunque...) evitar que se vaya. Quiero que se dé cuenta sola y que su decisión sea quedarse... Se que no parezco muy convincente.



Siempre en tu mente
Coraline

viernes, 28 de agosto de 2009

Mas trabajo

Héctor ha cogido confianza. I no es que me hable más, al contrario! Me hace trabajar mucho más!

Con lo de las horas extras no se... se habrá pensado... madre mía!!! Si me quedaba cada tarde sin darme cuenta más tiempo de lo necesario! Esto se ha acabado! El lunes recuperaré mi ritmo normal i me iré a casa a mi hora.

Además, no hemos tenido ningún seguimiento. Martín solo ha tenido que investigar a un par de personas a través del teléfono y yo básicamente he estado administrando fotos de hace unos cinco años... Héctor pretende que llegue a la actualidad. Pero de qué sirve? De qué sirve ordenar y seleccionar fotos que ni los clientes recuerdan? Héctor tendrá sus motivos. Pero ni tan solo son mías. Son del anterior fotógrafo y la verdad es que me he quedado embobada con muchas de ellas, son preciosas! A lo mejor por eso tardo más de lo que debería.



Siempre en tu mente
Coraline

martes, 25 de agosto de 2009

Que hace Martín?

Suerte que estoy masticando un chicle y voy haciendo burbujas que si no... que aburrimiento. Ayer estaba súper emocionada por esa misión especial pero... hoy Héctor no ha hecho ninguna referencia. Ni siquiera lo he visto.

Como buena noticia, informo que mi madre ya está en su casa, sana y salva... o mejor dicho... dejándome sana y salva a mí. La quiero mucho... lo digo siempre... pero...

A veces pienso que no tiene porque ser tan malo quedar-se en el interior sin salir a la caza con mi cámara en mano. No tiene porque ser malo estar todo el día sentada haciendo cosas sin importancia... vale, suena mal! i la verdad es que me aburro tantísimo!!! yo solo me tendría que dedicar a la fotografía, esto de archivar y hacer cosas para las que no estás contratado solo lo tendría que hacer Martín. El pobre (he dicho yo eso?) estudió derecho y se pasa el día archivando y archivando y archivando. Repasando, cobrando etc... todo el día en su silla. Lo que me pregunto es: realmente hay tanto trabajo. Realmente Martín trabaja? Que hace todo el dia metido en su propio cubículo?
tendré que investigar (así ocupo mi tiempo).




Siempre en tu mente
Coraline

lunes, 24 de agosto de 2009

Horas extra

Héctor me ha llamado a su despacho y horror! Me ha dicho que me pagaría las horas que estuve trabajando el fin de semana. Se ha enterado! Me va a dar algo... Está bien que me las pague. Pero creo que pensará que soy una desgraciada que no tengo nada mejor que hacer un fin de semana que ir a trabajar. Además... no hice nada, solo actualicé el blog y estuve mirando fotos de seguimientos, nada más. Aun así no he podido hacer nada más que asentir mientras él hablaba, porque, milagro! Ha hablado, bastante... para ser él. Me ha dicho que si tenía pensado ir que podría haber llamado que podría no haberse enterado de que había venido (ojalá no se hubiera enterado). Me ha dicho que el fin de semana le hubiera venido de perlas un fotógrafo y que había un cliente muy “importante” (con mucho dinero) que requería de un seguimiento, pero que es confidencial y que no le diga a nadie. ¡A nadie! Sé un secreto! No sé cómo lo voy a guardar.

Para arreglar la situación, podría pedirle un día libre entre semana y verá que hago algo... que no sea trabajar. Podría pensar que es para ir al médico o alguna cosa así... Piensa... cree que me tomo el trabajo demasiado en serio.... pero... eso es bueno no? Es mi jefe?... madre mía! A lo mejor por eso me ha confiado un secreto... porque soy trabajadora (pero no es cierto...).


Siempre en tu mente
Coraline

domingo, 23 de agosto de 2009

Sin plan

Ya es fin de semana, me he recuperado del resfriado, mi madre sigue en casa y marga ya ha mirado vuelos y lugares donde hospedarse de forma provisional, esto va en serio. No me lo puedo creer.

Además, es fin de semana y lo único que se me ha ocurrido hacer es salir a pasear para no estar todo el día con mi madre.

Y dónde estoy? Os preguntareis. Pues desde un sitio donde cuelgo habitualmente, mi trabajo, si. Ahora mismo mi pequeño cubículo me parece más cómodo que mi casa. No tenia que haber venido, hoy en teoría no trabajo pero, en fin, he llegado caminando aquí i al ver la puerta me he decidido a pasar a saludar. Solo estaba María. Hoy Martín tenia libre y Héctor... la verdad no sé donde está.

No sé qué haré con el resto de mi día ni si quiero quedarme mucho rato aquí, al menos espero estar fuera cuando llegué Héctor i que María no le cuente que he estado aquí. Sería algo deprimente que se enterara.


Siempre en tu mente
Coraline

sábado, 22 de agosto de 2009

Italia

–Coraline, no lo entiendes, es un experimento. Intentar cambiar de vida, de aires, de relaciones de forma de ser.
–Me gusta como eres... que haré yo sin ti?
–Podrás arreglártelas, siempre lo has hecho.
Mentirosa...

A Marga la han despedido, no entrare en detalles pero el hecho clave es que estaba esperando unas vacaciones y les han llegado unas “súper vacaciones”. Curiosamente cuando quedé con ella no me vino llorando, desesperada, diciéndome: que voy a hacer? Necesito encontrar algo! Si no que me soltó que se irá a Italia y que allí seguro que encontrará un trabajo, que aprenderá italiano, que conocerá a un italiano, que construirá su vida allí, será feliz rica y si todo iba bien incluso famosa.
Sus racionamientos eran muy lógicos pero el conjunto de sus palabras era una soberana tontería. Marga está decidida a abandonarme! Su vida aquí ya no tiene sentido y quiere empezar de nuevo. ¿eso se puede hacer? Desentenderte de todas las personas que has querido en tu vida?
Cuando se vaya... no me va a llamar nunca más, ni nos reiremos juntas, ni iremos a cenar, ni la podré aburrir con mis pensamientos...

Estoy algo triste por eso... Marga, espero que no fuera en serio, no te vayas.


Siempre en tu mente
Coraline

jueves, 20 de agosto de 2009

Sin prisas pero... ¿cuándo te irás?


No puedo más! A mi madre le encanta revolverlo todo!!! He vuelto a casa cansadísima, con cara de poca salud, pensando que mi madre ya se habría marchado, deseando darme un baño. Y me la he encontrado en la cocina haciendo una especie de sopa que no quiero saber yo que lleva y que evidentemente no me he tomado.
–Mami... no tengo hambre.
–Eso es que estás peor!
No sé si se me ha notado pero mi expresión ha sido cercana al terror. Si piensa que estoy peor se quedará más tiempo.
–Estoy muy bien, en serio. ¿Ves? Ya hablo casi normal. Me encuentro perfectamente.
–Perfecto! Pues podríamos ver una peli.
–Mañana trabajo.
He dicho a modo de excusa i he continuado:
–Por cierto... cuando tienes pensado volver a casa?
–Te refieres a mi casa?
Jo he asentido tímidamente.
–Es solo por saberlo.
–No lo sé! Estamos muy bien juntas, verdad?
Quien me puede dar el valor para decirle a mi madre que se vaya a su casa! O mejor a la casa de
su especie de novio? Que se reconcilien y que venda su piso de Barcelona... así viviríamos más pacíficamente.




Siempre en tu mente
Coraline

martes, 18 de agosto de 2009

Bebe mucha agua

Eso es lo que hago, no parar de beber. Llevo todo el día encima una botellita de agua y Héctor aún no me ha necesitado para ningún seguimiento, he estado haciendo papeleo todo el día. Ya lo se... estando como estoy quizá es mejor, pero es muy aburrido. Preferiría quedarme en casa. Ojalá fuera invierno para poderme envolver en una manta i tomarme una sopa, esas cosas no se pueden hacer en verano ni que estés enferma.

Seguramente ya habréis pensado en las consecuencias de beber tanta agua (No diré nada más...).
¿Lo peor de todo? No sé cómo, pero mi madre sabe que estoy malita. Alguien me ha delatado... ¿quién? No lo sé. Bueno, el caso es que se presento en mi casa cuando yo estaba trabajando. Se pensaba que como estaba mala no iría a trabajar y me la encontré en el portal, esperándome, muerta de calor. Me dijo que había estado muchas horas allí, pero yo creo que no es cierto... no podría estar tanto rato sin hacer nada. Una vez en mi casa me dijo que se quedaría a dormir i que me cuidaría.

–Pero... si tampoco estoy tan mal.
–Tonterías! Para que está si no tu madre?

Pues está para ponerme aún más enferma porque no me dejo dormir hasta la una y hoy trabajaba... Lo sabía, y se ha acordado porque ha tenido el detalle de despertarme y darme una botellita de agua antes de salir de casa.

–Bebe mucha agua.


Siempre en tu mente
Coraline

lunes, 17 de agosto de 2009

Resfriado

Me encuentro fatal, no se porque he venido a trabajar. Creo que los “cambios bruscos de temperatura” me han afectado, a lo mejor es porqué no tomo actimel… no?
…no
Pues he venido a trabajar porque esperaba que hoy hubiera un seguimiento, al llegar he deseado que no fuera así y la verdad es que cuando Martín me ha dicho que había un seguimiento no me lo podía creer, después Héctor me ha aclarado que no necesitaba fotos y que iría el solo. Creo que me ha mirado con cara de pena… (¿Como se atreve?) ¿Tanto se me nota que estoy mal?


El hecho es que me he quedado en mi cubículo repasando las fotos del último seguimiento, retocándolas, ampliándolas y cortándolas. Eran perfectas, todas, excepto una, por un detalle. Salía Héctor. No lo entiendo. Yo apunto y disparo a la perfección y en esa foto se veía al objetivo en primer plano comprando chicles y de fondo a Héctor mirando directamente a la cámara. Es un error bastante grande porque si esas fotos cayeran en manos de alguien podría descubrir quien las ha hecho. Aunque Héctor también cometió un error al mirar directamente a la cámara, no podemos tener ningún contacto durante el seguimiento, a no ser que sea estrictamente necesario.
Podría alegar que estaba enferma des de el viernes pero además de ser mentira estas fotos no verán nunca la luz, las voy a borrar ahora mismo.

Siempre en tu mente
Coraline

domingo, 16 de agosto de 2009

Frena un poco


Si, ayer finalmente fui a la playa, me puse 10000 litros de crema solar y aún así, me quemé. Suerte que hoy es domingo y me puedo pasar el día en casa, tirada en el sofá untándome con aftersun y mirando películas en la tele.

Vale, podría hacer muchas cosas mejores. Pero he decidido que tras aprovechar al máximo mi sábado podría hacer lo que quisiera con mi domingo. Y lo haré, aunque mi madre ha vuelto a llamar. Le he dicho que hoy estaba súper ocupada, y en cierto modo es verdad. Tengo que ponerme el aftersun o iré mañana hecha una gamba a trabajar. Y eso no queda muy bonito. Además, no quiero que mi madre me vea quemada, le daré pena y querrá ayudarme de mil formas distintas. Como si con la piel quemada no me pudiera ni mover… aunque no me importaría que alguien me trajera un gazpacho.


Por cierto, esta noche he soñado con Héctor… bueno… más o menos. El estaba en su despacho y me hablaba desde dentro mientras yo estaba ante la puerta y solo veía su sombra a través de los cristales mates de la puerta. No recuerdo que me decía, pero recuerdo que era una pesadilla.



Siempre en tu mente
Coraline

sábado, 15 de agosto de 2009

Manía persecutoria


Ayer al final no fui a la playa. Héctor y yo fuimos a hacer un seguimiento. Fue muy emocionante porqué el objetivo tenia sospechas de que lo estaban persiguiendo i iba mirando cada segundo hacia atrás. Héctor me dijo que tenía que saber camuflarme y que solo hiciera las fotos necesarias. Era como perseguir a alguien realmente importante. A un ladrón, un asesino saliendo de la escena del crimen… Aunque si este hombre tiene manía persecutoria, lo siento por el… ser perseguido de verdad no ayuda en nada a curar estas cosas.
Estaba muy cansada y pensé: Mañana es sábado así que puedo ir i vendrá Marga i también Carla. Hoy si que si. Hoy ya he quedado, todo está zanjado, ¡esta tarde voy a la playa! Ya tenia hecha la bolsa de ayer y le he añadido cosas. Además ha sido una buena excusa para no quedar con mi madre. Se aburre y quería ir a pasear conmigo (¿que os apostáis a que habríamos hecho la súper caminata?), no está acostumbrada a la ciudad, no es lo suyo.
Como tengo tendencia a quemarme, he pensado en coger mil litros de crema solar o bañarme en ella directamente.
Siempre en tu mente
Coraline

viernes, 14 de agosto de 2009

Días de sol

El sol brilla, los pajarillos cantan. Vale, te achicharras, te fundes y... bueno, dejémoslo en que es asqueroso. Pero es una buena excusa para ir a la playa, refrescarse, tomar el sol y básicamente no hacer nada útil.
Estos últimos días he pensado:

"¿Porque no vas a la playa?"

Esto a las siete y media de la mañana, antes de ir a trabajar. Me planteo de ir por la tarde, en cuanto salga. Así que meto el biquini en una bolsa, una toalla, crema solar y la verdad, poco más.

¡Así que hoy estoy convencida! Tengo mi bolsa hecha y no hay nadie que me pueda parar! Llamaré a Marga y a alguien más. Será genial!


Que no llueva, que no llueva.




Siempre en tu mente
Coraline

jueves, 13 de agosto de 2009

El gorro

¡El gorro es horrible! ¡Dios mío! Esta mañana llego al trabajo y nada más entrar María me dice que tengo una llamada, yo, una llamada (nunca me llama nadie). ¿Quien sabe el número del trabajo? A lo mejor era alguien desconocido que quería entrevistarme para otro trabajo o quizás era una llamada de auxilio, las posibilidades eran muchas pero he decidido que ninguna de ellas era probable. Después de pensar, he decidido responder rápida al teléfono. Era mi madre.

– ¡He encontrado el gorro! –me ha dicho súper emocionada.

Era muy temprano, así que no he reaccionado, y en realidad me alegro porque cuando he visto el gorro quería huir. Pero no avancemos acontecimientos.

­–Ahora vengo a tu trabajo –ha chillado desde el otro lado del hilo telefónico.

– ¡No, mamá, aquí no! ¡Ahora no!
Pero ya había colgado.
He empezado a removerme nerviosa, mi madre iba a venir.

“Por favor, Héctor, sal de tu despacho y di que tenemos un seguimiento o cualquier otra cosa que nos permita salir de aquí.” He pensado histérica, sentada en mi mesita sintiéndome encerrada.

– ¿Aún no has encendido el ordenador? –ha dicho Martín mientras cerraba la puerta tras él.

Estaba demasiado nerviosa para responderle, pero me gustaría haberle dicho que el llega tarde i por tanto su ordenador no está apagado, está en coma. Como lo odio.

Me estaba ahogando tanto, tanto en mi silla mirando a una pantalla apagada que al final he decidido que no podía ser. He sacado mi móvil de mi bolsillo y, desgracia, no tiene batería. Por eso mi madre me ha llamado al trabajo. He mirado el móvil, le he dado unos golpecitos y he intentado volverlo a encender, pero nada.

Así que me he levantado de mi silla, he pasado por delante de Martín i de María a toda prisa y he salido del edificio. A tiempo he salido porque justo llegaba mi madre con una sonrisa enorme i una caja de sombrero.
–Espero que te guste –me ha dicho.

I mientras abría la caja la he regañado por venir al trabajo de manera tan brusca. Pero parecía que no tenia la atención puesta en mí, ni tan solo en el gorro, miraba más allá como si todo esto no fuera con ella.
"Tranquila Coraline, tu madre no dura mucho en Barcelona, se aburre en las ciudades grandes donde no puede hablar con nadie" he pensado aliviada, pero luego me ha venido otro pensamiento: "no puede hablar con nadie excepto conmigo".

Pero cuando he visto el gorro se me ha olvidado lo demás, ¡es horrible! ¡Además tiene tres lazos! ¿Como un gorro puede tener tres lazos? No es para nada distinguido y espero que mi gabardina no lo vea jamás.

–Gracias –he dicho con una fingida sonrisa–. Ahora tengo que ir a trabajar.

Nos hemos dicho adiós, he entrado y me he sentado en mi silla bajo la atenta mirada de mis compañeros y ahora yo estoy aquí con este… “maravilloso” gorro.



P.D. He encendido el ordenador.


Siempre en tu mente
Coraline

miércoles, 12 de agosto de 2009

Los siete motivos

Razones acordadas y pactadas por las que no debo y no rebelaré información específica de los casos en los que trabaje ni colgaré fotos.

1. Alguien del trabajo puede descubrir el blog y darse cuenta de que soy yo la que escribe.

2. En ese caso, podrían despedirme por revelar información confidencial.

3. Alguno de nuestros objetivos podría tener acceso a una investigación sobre si mismos.

4. No tengo mucha idea de los casos porque Héctor no me cuenta gran cosa.

5. Con información de circunstancias específicas o directamente con las fotos, gente que conoce al objetivo podría descubrir que es objeto de investigación… y… pobre objetivo ¿no?

6. Puedo dar a entender que tengo más información de la que tengo. Si no doy ninguna parecerà que mantengo el misterio (me sentiré más importante (es una tontería).

7. No tener que apuntar los datos importantes a cada instante para no olvidarlos (de eso se encarga Héctor y no me deja ver el informe).


Aquí están las razones… no se me ocurrieron tres más para llegar a las 10… pero da igual. Marga aportó alguna cosilla más pero… vaya… (lo siento Marga) no tenían mucha lógica. Solo decir que es muy temprano y que Martín aún no ha llegado. Tengo sueño y ahora mismo voy a destruir el papel en el que me apunté las siete razones, porque si lo ve alguien, preguntará.


Siempre en tu mente
Coraline

martes, 11 de agosto de 2009

Felicidades Coraline

Hola a todos! Estoy muy emocionada. Estoy pasando las fotos que hice ayer y (esta mal que lo diga yo) son fabulosas! El hombre que seguíamos llevaba un traje de corte perfecto, seguramente carísimo, y porque no decirlo, guapísimo. No daré más detalles para no poner en compromiso la investigación. Lo mejor ha sido que Héctor me ha sonreído. La verdad, no se que quería de esas fotos, no se porque seguíamos a ese hombre y no se encontró con nadie, pero resulta que hice la foto del millón y por mucho que la miro no veo nada sospechoso. El hecho es que cuando Héctor la ha visto, vamos! Que casi salta! Nunca lo había visto sonreír, o no recuerdo que lo hubiera hecho nunca. I me ha dicho:

­–Felicidades Coraline.

Ya le puedo estar diciendo a Maria que no me va a despedir.
Creo que Héctor me empieza a caer bien… o quizás es momentáneo, porque aún me da miedo.

Nota: no tiene sonrisa de psicópata (yo creía que si).

Por cierto, si cuelgo alguna foto no podrá ser de ningún seguimiento… tengo miedo de que me pillen… y si Héctor lee lo que pienso de él, tengo miedo. Mañana pondré las razones por las que Marga y yo creemos que no se han de rebelar ciertas informaciones.

No nos preocupemos ahora! Que estoy feliz.



Siempre en tu mente
Coraline

lunes, 10 de agosto de 2009

Sonrisas distorsionadas

Dije que hoy habría trabajo de campo, verdad? Digamos que todo se ha complicado. No se como no se me ocurrió que en mi día libre Martín haría mi trabajo con una cámara de fotos cutre... una de esas digitales que regalan en... en definitiva: que son malísimas y las fotos que sacan, perores. Además Martín entró en mi ordenador para pasar las fotos y que me las encontrara hoy (no quiero pensar que hubiera pasado si hubiera indagado y hubiera encontrado mi blog). Pues ahora tengo más de trescientas fotos borrosas hechas por un hombre que se aburre tanto de su trabajo que tiene que hacer el mío. Evidentemente no es culpa suya, pero es mejor desmenuzar a Martín que a... Héctor... Como le tenia que decir que no le diga a Martín que haga mi trabajo? No ha habido falta, la verdad (que alivio). Maria se ha dirigido a mi cubículo un poco nerviosa.
­
–Coraline, el jefe quiere verte.

Yo me he levantado, evidentemente sin hacer caso del tono de “te van a despedir” que trae siempre Maria.
Me he encontrado a Héctor serio, leyendo unos papeles, he hecho ruido al cerrar la puerta pero no ha dirigido la vista a mi hasta que (creo yo) ha acabado de leer lo que tenia que leer. Entonces me he encontrada con su mirada intimidatoria. Sus ojos negros, profundos que parecen decir: no te voy a despedir porque habrás muerto antes.

“No me mates, no me mates... quiero decir... no me mires” iba pensando yo.

–Se pueden arreglar esas fotos? –me ha preguntado distante pero con la misma mirada.
He negado con la cabeza con una sonrisa, no quiero que note que me da miedo.
Y hemos salido a la caza! Con mi precioso equipo fotográfico y con Héctor a una buena distancia de mi, clavando su mirada a alguien que no era yo (Yuju!).
Siempre en tu mente
Coraline

domingo, 9 de agosto de 2009

Pasada por agua

Estoy empapada, es tarde, me caigo de sueño y mañana trabajo. Mi madre ha estado arrastrándome por toda Barcelona en busca de un sombrero.

–Sabes hija? Encontré un sombrero que pegaría a la perfección con tu gabardina.

–En serio? –he dicho yo con demasiado entusiasmo–. Donde?

–La verdad es que... cuando fui a por magdalenas... en un escaparate...

Así que mi madre y yo hemos recorrido media Barcelona en busca de un sombrero (Porque a mí?) Llovía a cántaros y a mi paraguas le ha dado por ponerse del revés, además, después de la experiencia de ayer con los zapatos, iba con unas cómodas zapatillas de tela que han acabado inundadas. Mi madre iba con su paraguas toda convencida por delante de mi diciendo:

–Creo que es en el siguiente cruce.

Y cuando llegábamos al condenado cruce:

–Será el siguiente.

Lo positivo de todo esto es que me ha invitado a comer fuera porque cuando le ha entrado hambre estábamos ya muy lejos de su casa. Lo negativo es que estábamos cerca de la agencia y podía ver el cartel y el coche negro de Héctor desde la ventana del restaurante. Así que acabado el fin de semana, he pensado en el trabajo más de lo conveniente. En que hora acepté pasar el domingo con mi madre? Vale, cuando me llamó esta mañana diciéndome que estaba en Barcelona, que había vuelto a su casa por un tiempo (vive en casa de un “amigo” a ratos si a ratos no...) Si no fuera porque la quiero mucho... es más alocada que... alguien alocado... no tengo fuerzas para pensar. Después de comer hemos estado horas y horas buscando el sombrero mientras mi madre se probaba toda la ropa centelleante que encontraba (yo mientras me iba arrastrando cada vez mas mojada).

–Quieres que te pida un taxi?

–No, vamos caminando, me acompañas a casa, verdad?

Y me pone esa miradita con la que no puedes decir que no.

La he acompañado a casa y luego he cogido el metro y aquí estoy.

Pero después de lo que he luchado por ese sombrero con el que junto a mi gabardina hubiera parecido una autentica detective privada... lo quiero!!


Siempre en tu mente
Coraline

sábado, 8 de agosto de 2009

Por fin es fin de semana!

Y no es que me haya olvidado que ayer no trabajé, es que el fin de semana se disfruta más en fin de semana. Saber que es sábado es genial.

Esta mañana ha llamado María. No me lo podía creer. Trabajo de última hora? Pues no! Me ha dicho que hoy ha venido un cliente “importante” (significa con dinero) pero que no hace falta que me encargue, al menos hasta el lunes, solo me quería avisar (siempre cree que me quieren despedir y yo le caigo bien). Así que el lunes habrá trabajo de campo, genial!

Esto me ha animado. He pensado en salir a hacer algunas fotos y olvidarme por completo de que ayer me encontré a Héctor tan cerca de mi casa. El día promete! Brilla el sol (de acuerdo, hace calor) y tengo la sensación que hoy no habrá tantos turistas en la calle y que me saldrán unas fotos preciosas. Que podré improvisar e ir donde me apetezca en cada momento, aunque sin el coche. Tengo coche, es muy mono, de color verde, pero no lo cojo muy a menudo porque para moverse por esta ciudad lo más incomodo que puede haber es conducir. Supongo que por cualquier ciudad, para lo que me sirve es para salir de Barcelona.

I si salgo? Hará casi... un mes? A ver... el cumpleaños de mi madre... Un mes! Pues hace un mes que no cojo el coche... vaya... y que no salgo de Barcelona, es curioso como de centrada en esta ciudad está mi vida. Saldré! Haré fotos sensacionales!
Será genial! Comeré fuera (así no tendré que cocinar) y alquilaré una película para la vuelta, pero nada de trabajo, una película sin detectives, policías... pero quizás si fotógrafos... veré una comedia... invitaré a Marga y le contaré lo de Héctor, quizás he hecho una bola de esto, pero se podría decir que es mi cafetería.

Espero que se quede a dormir así mañana podemos ir a comprar cruasanes para desayunar. Creo que el fin de semana me transforma de algún modo, supongo que es porque mi día a día está sometido a constantes cambios y me gusta organizar mi tiempo libre.



Siempre en tu mente
Coraline

viernes, 7 de agosto de 2009

Persiguiendo un capuchino

No os creeréis lo estúpida que puedo llegar a ser y lo que soy capaz de hacer para tomarme un capuchino. Hoy esas dos cosas se han unido con unos zapatos para matarme (sentido figurado).


Hoy no trabajo, a no ser que me necesiten. Como el martes estuve toda la noche persiguiendo a un chico de dieciséis años, Héctor me dio el viernes libre. Ayer fui a cenar con Marga, mi amiga. Me contó que tiene ganas de vacaciones para irse a Italia. Pero las últimas las desaprovechó tumbada en casa durante quince días, así que creo que Italia tendrá que esperar.


Hoy me he levantado a las doce, porque al volver ayer vi una película en la tele y después de esa otra. Eran estúpidas y ligeras, así que no me las dormí, eso sí, me tragué la publicidad (creo que ahora me apetece comprar dos botes de aceitunas al precio de uno). No he desayunado, directamente me he preparado una rica comida (de microondas) y he vuelto a sentarme ante la tele.
Mientras veía más y más anuncios he pensado: Que harás esta tarde con tu tiempo libre?
He pensado en ir a tomar un buen capuchino. Me he vestido al fin y me he puesto unos zapatos especialmente incómodos (detalle importante) pero preciosos.

He bajado las escaleras. Justo debajo de donde vivo hay una cafetería monísima en la que hacen el mejor capuchino que he probado nunca. Iba toda convencida cuando por el cristal, antes de entrar he visto a Héctor, mi jefe. Hablaba por el móvil y estaba solo seguramente esperando a que le trajeran algo. Me hubiera acercado a decirle algo si hubiera sido María, por supuesto, incluso si hubiera sido Martín, el asqueroso, pero era Héctor y Héctor me intimida. Si no hay motivo para hablar con él no hables con él. Si me hubiera acercado a decir “hola” a lo mejor se hubiera ahorrado el saludo por innecesario y me hubiera quedado en blanco.

Así que lo que he hecho es ir a otra cafetería (tonta de mí). Sabía perfectamente dónde ir. No se puede ir a cualquier sitio a tomar un capuchino, así que he andado mucho, mucho, mucho.

Cuando he llegado me dolían los pies (no he disfrutado de mi capricho) y al volver me dolían más.

Acabo de llegar a casa y me arrepiento de no haber entrado en la cafetería de abajo y haberle hecho caso omiso a Héctor.

Ojala tuviera un jefe invisible. De esos que trabajan en la planta cincuenta y seis mientras tu estas en la dos o mejor, a Charlie! De los ángeles de Charlie. O a un Héctor-Charlie.

–Coraline tienes una misión

Sonaría en ese horrible altavoz.

–Que pasa Charlie...digo Héctor, a quien tengo que patear?

Diría yo con una vocecita dulzona con mi cámara de fotos en mano dispuesta a pasar a la acción.

–Ve a hacer fotos a un hombre seboso, su mujer cree que no va al gimnasio cada día, piensa que con el dinero come más y más y más.....

Puuuufffffff (la burbuja se ha pinchado)

Si tuviera buenos casos con los que fantasear.



Siempre en tu mente
Coraline

jueves, 6 de agosto de 2009

Mañana de jueves

Escribo esta entrada desde mi mesa de trabajo, sí, tengo una. Vale, es una mesa con un ordenador obsoleto y fotografías sobrantes especialmente válidas estéticamente (aunque no está bien que yo lo diga).
En este trabajo no hace falta que una fotografía sea bonita, vale con que sea nítida, en eso soy una experta, así que supongo que por eso aún sigo aquí, pero me gusta buscar la belleza de esas situaciones y plasmarla en mis fotos. Como resultado tengo mi pequeño cubículo empapelado de los restos. Se pueden ver cosas como un hombre corriendo con el abrigo volándole a sus espaldas con una preciosa iluminación matinal, un beso de dos amantes delante de una floristería llena de rosas (que habría servido para la investigación pero me la quedé yo)...etc. Además de eso, encima de mi mesa se pueden encontrar varios vasos de plástico que alguna vez habrán contenido café y que tendría que echar a la basura (nota: comprar una taza para el trabajo). Además, claro está, tengo mi equipo fotográfico en el que me instalaron programas completísimos en el ordenador para que pueda hacer lo que quiera con las fotos y la impresora que no puede tener más botones ni ser más buena, las fotos salen brillantes, con luz propia, me encanta.


Y por aquí llega el vago de Martín (directamente diré que no se llama así, el único nombre que puede ser real es el de mi pez Max), siempre llega tarde pero nadie le dice nada porque si recibe una llamada de urgencia es rápido como una bala. Lo odio. Bueno, simplemente, me gusta mantenerlo en la distancia. Estudió derecho, se encarga de la parte más... aburrida del trabajo y en caso de encontrarnos con un delito él hace el papeleo, informa a la policía etc. Y cuando no hay trabajo interesante, como ahora, simplemente se dedica a archivar. A parte de él trabaja María como secretaria (tiene ya una edad, creo que pronto se jubilará) y evidentemente el jefe. Se llama Héctor (o no). No habla con nadie, sobre todo cuando está en su despacho, excepto con los clientes, aunque siendo precisos, les deja hablar a ellos. Cuando trabajamos apenas me dice lo que tengo que hacer, no he tenido en mi vida una conversación normal con él, ni tan solo cuando me hizo la entrevista. Estaría todo el día dentro de su despacho, pero cada vez que un cliente llega con sus paranoias, tiene que salir a la calle, la mayoría de veces conmigo pegada. Cogemos un taxi, cruzamos Barcelona y a trabajar, es mi parte favorita, pero creo que hoy simplemente me voy a quedar aquí.



Siempre en tu mente
Coraline

miércoles, 5 de agosto de 2009

Amanecer por monotonía

Este título expresa perfectamente el porqué de este blog: el aburrimiento. Aunque se que tengo una vida completa y las personas que se cruzan en mi vida no son menos que interesantes, el hecho de encontrarme día tras día esperando un caso especial me ofusca sobremanera. Trabajo en una agencia de investigación privada, soy fotógrafa. Es un trabajo cada vez más aburrido y a veces me encuentro imaginando que estoy siguiendo a un autentico criminal (un ladrón, un asesino...) cuando en realidad sigo a personas aburridas con vidas aburridas y solo me encargo de hacerles fotos a sus aburridas caras.
Porque no me dedico a otra cosa? Porque no trabajo en una casa de fotografía? Porque no hago fotos en bodas y comuniones? La respuesta es simple, no se puede salir de un tanque de agua para meterte en uno con tiburones. No se me ocurre cosa más aburrida que pasar mi día a día viendo a gente casándose, haciendo la comunión o posando para una foto de carnet en la que todo el mundo sale mal (quizás tendría que proponerme la meta de que alguien salga bien en esas fotos). Imaginarme en una persecución, tener tan cerca archivadores con casos de hace años es apasionante, es inspirador. Me hace creer que algún día los casos serán distintos y mis compañeros también.
I porque no hago fotografías para revistas? O para periódicos? Si me conseguís un trabajo así lo acepto, creedme, o no me creáis, porqué realmente os estoy diciendo la verdad? Como podéis saberlo? Puedo deciros que vivo en Barcelona (cierto?). Puedo deciros que tengo un pez llamado Max (es verdad?). Solo os diré que mi nombre no es Coraline iyque todo lo que leeréis en este blog puede ser cuestionado, todo está en el aire.
Mi vida no es muy inquietante pero espero que la visión que tengo de ella sea interesante.


Siempre en tu mente
Coraline