sábado, 19 de diciembre de 2009

Mi cumple


Oficialmente tengo 33 añitos, y digo añitos porque aun soy joven (mucho, vale?). Ha sido un día muy frío pero, mi cumpleaños ya suele serlo.

Ha llamado mi madre... obviamente, muchas veces!! A la quinta me ha felicitado. Gracias Mami.

Con quien lo he celebrado? Marga me ha llamado y hemos salido a comer con las chicas. Me han invitado a un restaurante y la verdad parecía que nunca nos hubiéramos distanciado. Ha sido raro, así que por la tarde he sacado todo mi egoísmo i he salido a pasear.
Futbol, si, efectivamente. Todos los bares estaban retransmitiendo el partido del Barça i entonces me he acordado de mi padre... No sería mala idea ir a verlo verdad?
Pues aunque parezca raro, ahora estoy en su casa. He decidido pasarme por mi casa, coger lo suficiente para viajar i me he subido a un tren, con un viaje de un par de horitas. La verdad es que estoy muy contenta.

Mi padre es genial, aunque le gusta vivir en su mundo y no es muy dado a las visitas. ¡Me ha recibido con tanta ilusión! ¡Me ha regalado un cuadro! Es artista.
Me estoy planteando pasar de mi madre y mi hermana y dedicarme de lleno a mi padre. Aunque me sabe mal por mis sobrinitos. En estos momentos mi mente piensa en actos criminales, como el secuestro de los niños y llevarlos con el abuelo por Navidad.

¡Ha sido un día redondo!


Siempre en tu mente
Coraline

miércoles, 16 de diciembre de 2009

Rompiendo el silencio

¡Hola! Estoy muy ilusionada. ¿A que no adivináis? Estoy en una de las muchas bibliotecas de Barcelona con mi portátil i un montón de libros rodeándome.
Debo dar una imagen muy interesante.
Os preguntareis que hago aquí sin mi cámara cerca. Pues estoy investigando. La verdad, no sé el que.

Héctor me ha mandado fuera para hacer una búsqueda histórica (no puedo decir de que). La verdad es que es muy interesante, pero, ¿que tendrá que ver con alguien vivo? Espero que no esté intentando investigarme de alguna manera.

“No seas tonta Coraline”

El ambiente de la biblioteca es serio y la verdad es que está casi desértica. Hay algún que otro hombre con portátil i gafas i unos abuelitos en las butacas leyendo la prensa gratis (¿yo acabaré así?), los tacones no abundan y la verdad es que lo siento porque he tenido la genial idea de llevarlos yo misma, produciendo un incómodo repiqueteo, rompiendo el silencio sepulcral i místico que se puede incluso respirar. Tengo la sensación que cada movimiento que hago es más ruidoso que el anterior.

“¿La gente me mira?”

Estoy paranoica. Creo que la manía persecutoria, va a por mí.


Siempre en tu mente
Coraline

domingo, 13 de diciembre de 2009

Loteria para todos

http://alasdeplomo.com/2009/11/14/regalamos-loteria-de-navidad-2009/

Vaya! Mirad lo que he encontrado en el blog de Yopopolin... lotería gratis! Jeje.
Me apunto! La idea es repartir el premio (si toca algo) cosa que significa que quizá nos dé para un chicle jeje, pero es divertido i hace ilusión. Para apuntaros solo hace falta tener un blog y anunciarlo en el, luego invitar a 5 blogs.

Yo invito a:

Unwritten blog
Pensamientos y más cosas
Cats don’t fly
Fuera queda el ruido
Placeres

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Pensando por anticipado

Buenos noches desde el día 9 de mi calendario de adviento. Quedan diez días para mi cumpleaños i 16 para navidad. No es que lleve la cuenta...
Estos días he estado pensando en mi familia y en como resolveré volver a verlos o como lo evitaré. Ya sé que no es muy normal que me encante la Navidad y a la vez no quiera ver a mi familia... Se dice que la Navidad es una fiesta familiar, yo lo veo como algo personal, me sube la moral y mi familia, muchas veces queda lejos de esto, incluso en el lado opuesto. Que espero entonces?
Mmmm... lo primero es esperar al regalo de María. Es un cielo! Como piensa que cada año me van a despedir me compra un regalo y me da un gran abrazo. Cada año espero su regalo y desde el año pasado tengo la intención de corresponderle... digo la intención porque... bueno... no soy muy buena haciendo regalos...
Realmente estoy quedando como una egoísta... vaya... qué va! Me encanta hacer regalos, pasearme por las tiendas y hacer de papa Noel, pero... al final siempre veo en sus caras esa mirada de: no me gusta pero no te lo diré. Y sueltan un: gracias, me encanta...
Que chasco! Este año no me va a pasar!


Siempre en tu mente
Coraline

sábado, 5 de diciembre de 2009

Luces nocturnas

Las luces de navidad ayer me alumbraron. Salí a pasear solo para ver como Barcelona está a punto para la llegada de la Navidad. Mi cumpleaños está cerca (o al menos eso parece) y me hace muchísima ilusión ver que todo es propicio. Me encanta mi cumpleaños. Es la antesala de las fechas Navideñas i siempre a partir del 19 me siento de vacaciones. No hago nada extremadamente especial, y tengo que ver a mi madre (que miedo este año! No creo que se atreva a venir después de la que le monté), pero en esa fecha me embarga un sentimiento de felicidad, soy egoísta por un día y me doy caprichos. La gente me llama y estoy sonriente, es mi día de suerte por así decirlo.

Paseo por las calles bajo las luces navideñas y parece que ya sea ese día. Las vacaciones se acercan, nos acechan y yo ya me siento como si estuvieran aquí.

Por cierto, ayer, escuché por la radio que en la decoración navideña en Barcelona esté año habían querido ser tan internacionales que habían metido la pata. Me explico. Hay luces con la frase “Feliz navidad” (o algo similar jeje) en varios idiomas; pues bien, la frase en alemán está mal escrita, le falta una diéresis, y la que está escrita en árabe no significa absolutamente nada. Que no tienen correctores? Dicen que ha sido un problema informático. Aun así yo las veo preciosas (veis como empieza a envenenarme el egoísmo?)

Deseando que anochezca para ver brillar las calles.


Siempre en tu mente
Coraline

martes, 1 de diciembre de 2009

La razón de mi desaparición

Supongo que tendría que haber actualizado antes pero aunque parezca imposible he estado bastante liada. Siento el retraso porque odio la expectación. He estado unos días sin ir a trabajar, que ya hacía falta pero he llenado mi tiempo para no pensar en lo que pasó, por eso he preferido no volver por el blog. Pero ahora me quiero encarar con la realidad i de hecho lo he hecho yendo a trabajar. Todo ha pasado, con estar una temporada sin hablarle a mi madre será suficiente.

Vuestra madre os ha puesto alguna vez en ridículo? No tanto como la mía. Aquí el relato de cómo mi madre consiguió que me avergonzara.

Una mañana de la semana pasada salí a trabajar como otro día cualquiera i al llegar María (la recepcionista) me dijo que Héctor (mi jefe) quería hablar conmigo. Evidentemente, María me dijo que me iba a despedir i yo no la creí (como siempre).

Entré en el despacho de Héctor esperando que me necessitara para un seguimiento però lo encontré muy serio, mirándome.

–Coraline, siéntate (hubiera dicho si ese fuera mi verdadero nombre (con eso quiero decir que las palabras fueron exactas).

Yo me senté i la verdad, no sé que dije, me estaba emparanoiando con que me iba a despedir así que no estaba preparada para el mazazo.

Héctor, que apenas habla, se paso unos cinco minutos hablando, yo no podía responder. Aquí un resumen de lo que dijo (porque de eso si no tengo las palabras exactas).

–Hace unos meses tu madre vino aquí i me pidió que te vigilara, después de discutir mucho con ella sobre su propósito me dijo que quería un informe y yo le dije que “evidentemente” (no sería evidentemente no?¿!) no podría hacer un estudio demasiado exhaustivo de una de sus empleadas por respeto (y el mismo respeto no te hace comentármelo solo salga mi madre!!?¿). Así que investigué un poco por encima pero no encontré nada. Así que no escribí ningún informe.

Por cierto, le puedes decir a tu madre que deje de pedirlo?


Qué??¿ encima!!!

Madre mía! Vuelvo a sentir la vergüenza de ese día!

Ya lo dije, le pedí a Héctor unos días de descanso, porque después de saber eso, no podía volver tan tranquilamente al trabajo.

Martín lo sabe? María lo sabe? No sé nada!

Podría pensar para consolarme que Héctor no llego a hacer nada, ni a vigilarme siquiera, de hecho lo llegué a pensar. Pero el otro dia al irme a tomar un capuchino a la cafetería de debajo de casa, donde ya dije que hacen los mejores capuchinos del mundo, me acordé que encontré a Héctor en MI cafetería, hace ya unos meses. Casualidad? Se lo tendría que preguntar?

Que significa investigación por encima? Buscarme en internet?
Prefiero no pensar que por eso me necesitaba tanto últimamente.



Besos! Intentaré actualizar más a menudo!

viernes, 20 de noviembre de 2009

Perplejidad

A veces la realidad que crees conocer no es tan mala. A veces solo hace falta pensar en: podría ser peor y así las cosas parecen más fáciles.

Yo creía que mi madre no se preocupaba demasiado por mi i me decía, bueno, está bien. Almenos no está encima de mí siempre (porque cuando lo está es insoportable).

Eso era lo que yo creía y aunque reconozco que tener una madre casi inexistente no era un gran aliciente, darme cuenta de todo lo que se ha estado cociendo me ha dejado aún más perpleja.
Mi madre es más lista de lo que pensaba. Y está claro que me pediré unos cuantos días libres. Héctor ni me preguntará el motivo si no, ya veo que no tiene escrúpulos.

Os contaré lo que ha pasado cuando tenga algo de tiempo para pensar y acabe de saber yo la verdad de todo el asunto.

Supongo que no es nada grave pero la sorpresa y la vergüenza me han dejado paralizada. Mi madre es única…



Siempre en tu mente
Coraline

domingo, 15 de noviembre de 2009

Ignorancia o paranoia

Probablemente tengáis entendido que los domingos son para descansar. Pero no es así. Creo que a Héctor se le está pasando algo extraño por la cabeza. Desde hace unos meses nunca había aceptado hacer un seguimiento en domingo pero últimamente parece que los seguimientos en extrañas circunstancias se suceden. Sé que pasa algo fuera de lo normal, pero se me escapa.

Hoy ha sido un día agotador pero realmente agradezco haber estado entretenida porque si no me hubiera quedado en casa sin hacer nada. Está claro que tengo que poner un poco de atención en mi vida social o a mi pez Max (es otro Max... no sufrió), será al único ser vivo al que vea. Podría comprarme un ficus.

No sé si Héctor cuenta como persona con la que interactúo. Porque si, yo hablo, pero el no. Que se cuece bajo esa cabecita y esos ojos terroríficos? Realmente da miedo pero quiero saberlo porque sea como sea me afecta. (Nunca he sido cotilla. Estoy siendo cotilla?). Me siento como si me utilizarán para algo que va más allá de mi alcance, pero sé que eso no es más que mi imaginación exigiendo explicaciones de algo que quizás no tenga más explicación que un hombre adicto al trabajo, que se aburre i decide trabajar y trabajar más por lo que me necesita.

Para colmo mi madre no para de llamar. Parece que me controle y yo intento mantener el misterio diciéndole que estoy ocupada cuando no lo estoy i diciéndole que estoy haciendo footing cuando estoy trabajando. Quiero poner ese punto tan ínfimo de misterio en mi vida. Ya sé que no tiene mucho sentido pero eso es lo que pasa por mi mente últimamente. Tendría que buscarme alguna distracción de verdad.




Siempre en tu mente

Coraline

martes, 10 de noviembre de 2009

El frío es psicológico

Es algo que me digo a menudo. Evidentemente me lo digo cuando estoy hecha un cubito por la calle con la bufanda llegándome hasta los ojos, el gorro casi tapándomelos i tantas capas de ropa que apenas puedo moverme. Si fuera cierto que el frío es psicológico, o si consiguiera controlar mi mente delante de temperaturas bajas, me gastaría menos dinero en ropa. Entonces mientras estoy pensando, como ahora mismo, estas cosas me doy cuenta que el frío si tiene que ser psicológico porque aún llevando quinientas capas de ropa continuo teniendo frío cosa físicamente imposible, mi cuerpo con tanta capa cual cebolla tendría que haber alcanzado al menos 50 grados.
Y ahora pensando en esto solo espero, deseo (I wish) que esta sensación psicológica que es el frío, esa sensación que produce mi mente, se mantenga mientras los termómetros, día a día, vayan marcando temperaturas más i más gélidas. Porqué a pesar de todo, aún estamos a otoño.




Siempre en tu mente
Coraline

jueves, 5 de noviembre de 2009

Seguimiento demasiado temprano

Tengo tantísimo sueño y tan pocas ganas de hacer nada…

No me preguntéis por qué motivo, pero ayer fui a dormir muy muy tarde. Pero esa no es la razón por la que estoy somnolienta. Muchas veces por la noche no tengo sueño, me paso dando tumbos hasta las tantas y al dia siguiente estoy tan fresca. Porque hoy ha sido diferente?

Héctor.

No hacía demasiado que no lo nombraba en este blog? Ahora vuelve a ser digno de mención. Mi jefe ha llamado nada más i nada menos que a las cinco de la mañana (no diré cuantas horas hacia que dormía porque os cogería algo). El teléfono ha sonado con ese tono tan molesto de los fijos de toda la vida que no han conseguido llegar donde los móviles con una suave sintonía y claro, me ha despertado. Lo he cogido y le he hablado a mi jefe con una voz de dormida ahogada por la almohada:

–Diga? –he dicho yo sin saber quien llamaba.

–Soy Héctor. Escucha, te necesito ahora, un seguimiento.

He pegado un salto del susto de tener a Héctor al otro lado del hilo i me he avergonzado de ir en pijama (que cosas tiene la mente…). Héctor me ha dicho sin dejar espacio para mis quejas o razonamientos que teníamos que quedar rápidamente y que fuera sin falta.

Y claro… me he vestido y me he ido. En el primer intento me he dejado el equipo fotográfico en casa y a dos calles (recorridas al trote) me he dado cuenta y he vuelto corriendo a trompicones y casi sin ver nada del sueño que tenía y que aún me hace bostezar.

No sé cómo he conseguido hacer fotos y mucho menos se como Héctor estaba tan despierto. Solo espero que las fotos no hayan quedado visiblemente mal.


Siempre en tu mente

Coraline

lunes, 2 de noviembre de 2009

Casualidad

El universo está en mi contra, este es un hecho que de momento no puedo demostrar pero tampoco negar. Para poder contrarrestar este pequeño problemilla que tengo con todo lo que está a mi alrededor parece que algunas casualidades se suceden para hacerme la existencia algo más interesante, no se si más fácil… pero por lo menos me hacen pensar.
Una de esas casualidades tiene que ver con mi zapatilla izquierda, un escalón i un semáforo. Cada mañana me pasa lo mismo, al menos desde hace unos días, todos estos elementos participan y me pregunto si realmente es una casualidad o hay algo planeado detrás.
Salgo de casa con las zapatillas puestas (me pregunto que pasaría si me pusiera zapatos sin cordones), y echo a caminar con el reproductor de mp3 sonando. Nunca me acuerdo de: este es el semáforo, llegamos al punto crítico; hasta que me doy cuenta de que tengo el cordón de mi zapatilla izquierda desabrochado. En ese momento decido pararme i justo entonces tengo un escalón a mi izquierda donde puedo pararme y el semáforo se pone en rojo justo el tiempo suficiente para que vuelva a dejar el cordón bien atado en su sitio. Me levanto i voilà, semáforo en verde y puedo continuar mi camino.
Todo sigue igual, no ha pasado nada, pero creo que después de haber escrito esto, mañana no me pasará lo mismo, iré pensando durante todo el camino en mi zapatilla izquierda y quizás ni se desabroche.



Siempre en tu mente
Coraline

domingo, 25 de octubre de 2009

Y Marga ha vuelto

Es sorprenderte de lo que te enteras en un día cualquiera. De que tu prima segunda por parte de padre tiene un hijo, de que una chica que conocías en el colegio sale por la tele, de que el padre de la peluquera de tu madre ingresó en un psiquiátrico y también de que tu mejor amiga volvió de Italia hará una semana.

Si, Marga volvió de Italia i me estoy empezando a sentir culpable por no haberla llamada en toda esta semana. Es injusto! No tendría que sentirse mal ella por no haberme avisado de su regreso? Ni una mísera visita, ni una triste llamada.

–Tú no me has llamado.

Jo no acabo de volver de Italia! Además, he tenido una mala semana.

–Ya te tocaba llamarme tu a mi no?

Porque la estuve llamando a menudo y ella nunca hacia lo mismo.

Me alegro de que el ordenador me vuelva a funcionar para poder quejarme en mi pequeño rincón de la red.

Espero que no piense que ahora todo será normal... solo faltaría que se volviera a ir y decidiera intentar “deshacerse de su pasado” y por tanto, de mí.

Siempre en tu mente

Coraline

miércoles, 14 de octubre de 2009

¿Porque se caen las cosas?

No logro entender cual es el mecanismo que hace que todo salga estudiadamente mal a propósito. ¿Quien dijo que un escalón ha de interponerse en mi camino justo cuando me llaman y tengo que girar la cabeza? ¿Y quien dijo que la gravedad tenia que aplicar-se con estricto método a los líquidos?

Me pregunto: ¿Porque se caen las cosas?

Ahora no me vengáis con teorías científicas sobre la gravedad, porque no me refiero a eso. Me refiero a: ¿Quién decide que mi café se tenga que caer sobre mi mesa de trabajo?

Explicaré los hechos.

Esta mañana me he despertado más cansada de lo habitual porque ayer me quedé mirando la tele hasta muy tarde. Eso no hubiera importado en absoluto si no me hubiera dormido, pero sí, me he dormido y me he dado cuenta una vez estaba ya vestida de que no me daba tiempo de hacerme una cafetera.

“No importa” he pensado somnolienta.

No, no importaba (en teoría) porque (en teoría), tenia café de polvos.

Pero he abierto el armario y he empezado a buscar y a buscar y a buscar más. Así me he pasado más tiempo del recomendado para no llegar tarde. He mirado el reloj de la cocina y me he dado cuenta que debería haber salido cinco minutos antes.

Así que he desistido. He salido i he empezado a andar por la calle como un zombie sin rumbo, dirigiéndome a mi acogedor lugar de trabajo.

Se me ha encendido la lucecita a los dos minutos:

“Compra café, Coraline”

Era la solución perfecta, solo tenia que comprar un café para llevar y todo seria maravilloso.

He entrado en una cafetería (una de las mejores, que no la mejor) y me he plantado delante de la barra. Después de cinco minutos esperando, con la chica diciéndome:

–Hace cinco minutos esto estaba vacío. En un momento acabo.

Me he dado cuenta que no iba a terminar en quince minutos así que he salido, porque, llegaba muy tarde. Justo antes de llegar una cafetería se ha iluminado a mi paso. Nunca me había fijado en ella, pero es muy mona. Esta justo al lado de mi trabajo, no da miedo, solo necesitaría entrar i comprar el café. De hecho, lo he hecho.

He dado dos sorbitos. Estaba delicioso. No me podía creer que al fin tuviera mi café.

He decidido entrar, sentarme en mi mesa i tomármelo con tranquilidad i no de pie o mientras subía las escaleras. Así que esos dos sorbitos se han quedado solos.

He subido las escaleras, he abierto la puerta. He saludado a María a Martín i he visto la figura de Héctor en pie en su despacho a través del cristal translucido. He dejado el café sobre la mesa, me he quitado la chaqueta i me he dispuesto a colocarla sobre el respaldo de la silla. En ese momento han pasado dos cosas, a la vez. La chaqueta se ha caído y el teléfono ha sonado. He cogido el teléfono con una mano y con la otra el café para empezar a dar sorbitos. Pero no había nadie al teléfono. Lo he colgado i me he agachado para coger la chaqueta. He oído de lejos la puerta de Héctor abriéndose i mientras me levantaba… La colisión ha sido espectacular. El café ha volado por los aires Héctor casi no se movía i me miraba interrogante i yo me encogía para no sufrir otro golpe. El café finalmente ha caído encima de la mesa. Dejándonos a Héctor i a mi ( no se como) limpios.

–Lo siento –ha dicho él secamente, apartandose, dejándome roja de ira.

Ahora os pregunto: Porque ayer hacían ese programa en la tele que me hizo estar despierta i por tanto ha hecho que esta mañana me quedara dormida y por tanto que no pudiera hacerme café de maquina, además quien decidió que hoy no tendría café de polvos, que la cafetería de al lado de mi casa estaría llena (si lo hubiera comprado allí me lo hubiera tomado en el camino), que alguien (no identificado) llamara en el momento que se me caía la chaqueta que Héctor no saliera mientras yo hablaba por teléfono, sino cuando me levantaba i que ha pasado para que yo tuviera el café en la mano justo encima de mi mesa?

¿La fuerza del destino? ¿Un montón de casualidades? ¿O alguien que se divierte fastidiando?





Siempre en tu mente

Coraline

lunes, 12 de octubre de 2009

Paseando en la oscuridad

Hoy es lunes y no tengo nada que hacer aparte de vaguear. Aun así hoy, no se por qué extraño motivo, me he levantado temprano (muy temprano). La luz del sol apenas se insinuaba por detrás de los altos edificios de Barcelona, cosa de la que yo no me he dado cuenta. No sabía qué hora era y las persianas estaban bajadas. Pensaba que me había levantado como una persona normal.

Entonces es cuando he decidido salir a pasear y a desayunar. Al pisar la calle me ha recorrido un escalofrío, la calle estaba desierta y las farolas aún estaban encendidas. En ese momento he sacado el móvil y he comprobado horrorizada que era demasiado temprano para cualquier persona con alma y más en un día festivo como el de hoy.

Así que he empezado a andar para entrar en calor. Iba andando hacia ninguna parte, esperando que llegará una hora razonable para ir a tomarme mi capuchino de la mañana en la mejor cafetería del mundo.

He visto como ha empezado a salir la gente, no he mirado la hora en ningún momento pero sabia que el tiempo iba pasando. Primero ha salido el footing a la calle, casi todos a la vez acompañados de algún coche. He pensado que se tiene que tener mucho valor para hacer footing en Barcelona, sobretodo en una zona tan urbana. Luego han salido los abuelos a comprar el periódico y luego los no tan abuelos a hacer lo mismo. Han llegado poco después los que iban a comprar el pan para el desayuno y finalmente aquellos que iban con los niños a pasear.

En ese momento el sol ya había salido por completo i me he quitado la chaqueta. He pensado en mi capuchino y he recordado los instantes en los que he paseado casi por completo sola por Barcelona (no es algo que se pueda decir a menudo).




Siempre en tu mente
Coraline

domingo, 11 de octubre de 2009

Afonia mental

Mañana es fiesta y ya he empezado a estar desocupada. Mi madre quiere que comamos juntas, que vayamos a ver a mi hermana:

–Al menos una vez al año –dice ella.

Pero ya la vemos una vez al año, por navidad. Para que pueda ver a mis preciosos sobrinitos i para que mi queridísima hermana pueda insultarme de forma disimulada por no estar casada, no tener hijos, por tener una casa pequeña, un trabajo del que apenas puedo hablar y lo peor es que mi madre le da cuerda para que siga con sus ofensivas palabras. Por eso evito ver a mi hermanita y evito ver a mi madre. Cuando se darán cuenta de que vivo exactamente como quiero vivir? Vale, no soy la persona más afortunada del mundo. Pero prefiero eso a no tener nada más que hacer que criticar la productiva vida de los demás.

No iré a verla porque estoy cansada y cuando estoy cansada no tengo voz para responder. Simplemente la llamaré por teléfono y le diré:

–Mamá quiere que comamos mañana juntas, con los niños, yo no quiero venir.

Me da miedo marcar el teléfono y soltarle esas palabras, no porque no tenga ganas sino porque empezará a criticarme con cualquier pretexto. Aún así espero ser tan clara con ella como me lo permitan mis ánimos.




Siempre en tu mente

Coraline

martes, 6 de octubre de 2009

Post-its

Quien quiere una libreta cuando tiene un post-it? Nadie! Lo aprendí en la recepción de María ayer y decidí instantáneamente apuntarme al carro. Fui a comprar post-its por la tarde con la intención de llenar mi cubículo de papelitos de colores que alegraran y organizaran mi vida.

He llegado esta mañana con toda la alegría, estaba ansiosa por sacar los papelitos de sus plásticos correspondientes y empezar a escribir y pegar, escribir y pegar, escribir y pegar.

He decidido abrir primero los post-its amarillos, los más típicos, los de toda la vida, de marca. Entonces he cogido un boli negro para que la nota resaltara más y... simplemente no he sabido que escribir. Se puede saber qué es lo que tengo que hacer o recordar? No es como una memoria fosforito que se pega para que no olvides nada? He mirado a mi alrededor frustrada y he anotado sin pensar:

Llamar a mi madre.

Qué? Porqué he escrito eso?

He arrugado el papel de color chillón i he abierto los de color azul que me dan más buenas vibraciones. I he escrito: Comprar chocolate.

He mirado el papelito, he leído la auto nota, la he vuelto a leer buscando errores o inconveniencias. Nada.

Lo he despegado del montón y... lo he pegado junto a una foto de un paraguas rojo. Precioso!! Y ahora recordaré que esta mañana me apetecía chocolate pero que no lo he comprado porque al salir del trabajo, solo cruzar la puerta, se me ha olvidado.



Siempre en tu mente

Coraline

domingo, 4 de octubre de 2009

Andas como un pato

Para explicar lo que quiero explicar hoy tengo que situaros dos años atrás en el tiempo. Durante un seguimiento que hacíamos Héctor y yo cuando apenas sabía de su manera de ser e intentaba ser... como soy con el resto de gente.

Héctor y yo estábamos siguiendo a un hombre joven, bastante guapo la verdad. Yo hacía fotos a cada momento y observaba la forma de trabajar de Héctor para empaparme del espíritu del trabajo. Llegamos andando y pasando desapercibidos hasta una estación en la que el monísimo objetivo se encontró con una mujer, joven, muy elegante. La verdad es que sentí una punzada de envidia y no hice las fotos de la misma manera. Cuando el hombre subió a un taxi, yo le hice una foto a la matrícula, Héctor se acercó a mí.

–Creo que ya hemos terminado. Te has fijado en la mujer?

Supongo a que se refería a ella de un modo puramente... de investigador... pero aun tenía ese punto de celos y dije (cosa que no habría hecho ahora por nada):

–Anda como un pato.

Cuando evidentemente no caminaba como un pato. Era elegante, perfecta, él seguro que se habría dado cuenta.

En lugar de decir nada de eso me miró, como intentando comprender, sin sonreír y apartando la mirada, sumiéndose en sus pensamientos, supongo.


Bueno, pues ayer llegué andando al trabajo, antes de entrar levanté la cabeza y vi que Héctor me estaba observando desde el balcón, le saludé levantando un poco la mano pero él no se movió.

Subí las escaleras pensando en porque me estaría mirando, conteniendo un escalofrío. Al llegar arriba María me saludo, Martín levantó la cabeza y encontré a Héctor aun en el balcón pero girado hacia mí.

–Buenos días. Me estabas observando? –pregunté sin saber muy bien porqué, nerviosa por la extraña situación.

–Andas como un pato –dijo con seriedad.

Yo creo que me puse rojísima. El no estaba sonriendo, me miró severamente y volvió su vista al exterior. Yo me giré bruscamente a sentarme en mi cubículo. Aun estoy pensando en si fue un cumplido o un insulto. Realmente se estaba refiriendo a ese día de hace dos años?




Siempre en tu mente
Coraline

martes, 29 de septiembre de 2009

La magia de la lectura

Estoy tan enfrascada en un libro que no veo más allá de sus páginas. Capitulo tras capitulo, cada vez estoy más convencida de que la vida es emocionante, que en cualquier momento pasará algo asombroso y pienso en los hechos de mi vida que pueden parecer a los de una novela.

Mi trabajo por ejemplo. Nunca había pensado en cuanto me gustaba. Tener la esperanza de tener un caso importante y fundirme con las sombras. Un jefe misterioso que hace tiempo que no me habla... tendría que temerle? Que hace Héctor cuando investiga? Pasa desapercibido. Se esconde, se encierra y observa sin ser observado. Fantasear con que yo merezco ser objeto de investigación es demasiado y no creo que realmente me gustara pero esta y tantas otras cosas despiertan mi imaginación y hacen que leer una novela policiaca me lleve a involucrarme en la historia y con los personajes, me lleva a compararme con ellos. A descubrir cual seria yo y cual los que me rodean.

“Y si la mancha que hay en el techo es de sangre?” Pienso alzando la cabeza “Y si alguien se suicidó aquí? Desde cuando está?”

Vuelvo a enfrascarme en el libro, devoro paginas y miro de reojo la puerta del despacho de Héctor al oír movimiento. No veo más que su figura por entre el cristal translucido y vuelvo a leer. Oigo el teléfono pero esta vez no aparto la vista del papel, está interesante, muy interesante, tengo la sensación que dentro de unos segundos mi vida se va a solucionar, que voy a descubrir el misterio, la trama está a punto de resolverse.

–Es para ti –dice María mientras levanto la mirada fastidiada–. Es tu madre.

Adiós fantasías, misterio y soluciones. La burbuja estalla en un millón de gotitas que se dispersan a mi alrededor y veo a Martín comiéndose un bocadillo de una manera asquerosa y mi pequeño cubículo desordenado. No tenemos casos, no hay nada que hacer. Y además, mi madre está al teléfono.


Siempre en tu mente
Coraline

lunes, 28 de septiembre de 2009

Gastos inesperados


Pasear rodeada de libros es un placer, ver libros y más libros a cinco o tres euros... Eso pasa cuando vives en Barcelona y hay una feria del libro de ocasión, que un día vas paseando por la calle y te encuentras paradas que puedes ir fisgando mientras paseas.

Después de salir del trabajo, hoy he optado por dar un paseo. He cogido el metro y me he plantado en el centro. Quería hacer unas cuantas fotos pero al final he acabado con un café para llevar calentito entre las manos i procurando que no cayera encima de ningún libro, así que no me quedaban manos para hacer fotos. Además, más tarde tenía otra carga: todos los libros que he comprado, en una bolsa de la feria.

Solo tengo unas cuantas hechas antes de ver la que había montada y una (en concreto la que he puesto) de después, cuando he cogido el tren.

Mientras se iba llenando la bolsa, se iba vaciando mi monedero. Está claro que si aparece un libro desaparecen cinco euros. Eso no es nada. Pero viene otro libro, y son cinco euros más. Y cinco y cinco y tres y cinco... ya os podéis imaginar. Al mirar la bolsa llena al final del camino he entendido que me podía olvidar de los caprichos por una temporada, que me los había comido todos de golpe. Porque en lugar de 100 libros (exageración) por 40 euros, podría haber comprado uno por 20 (lo que hago normalmente) y al fin y al cabo gasto menos. Pero supongo que tengo libros para leer durante meses (o para hacer que la mesilla de noche no cojee).

miércoles, 23 de septiembre de 2009

Calor... y nada más


(La primera foto que cuelgo, la hice hace unos dias
pero expressa exactamente lo que quiero decir).


Hoy me he vestido con un jersey por encima de la camiseta para ir a trabajar i una chaqueta por encima, porque a primera hora de la mañana hacia frío y puesto que ha hecho fresquito los últimos días, pensaba que no tenia porque preocuparme.

Que ingenua!

El calor me ha pillado desprevenida. Desde mi pequeño cubículo, de espaldas a la mesa, miraba por la ventana el sol abrasador que ha hecho que tuviera que quitarme mi precioso jersey.

Porque? No se suponía que tenía que refrescar estos días? Que le he hecho yo al mundo para que el tiempo sea así de bipolar?

Mirando por la ventana amenazaba al sol con la mirada para que se fuera i deseaba que llegara la noche para poder abrigarme otra vez.

–Coraline! Pásame las fotos del seguimiento del martes!

(como, cuando donde?)

Martín iba con manga larga i tenía toda la frente sudada, pero parecía no darse cuenta, me he estremecido al pensar que yo podía estar igual. Así que simple y llanamente he optado por evitar a Martín y mis viajes al baño para mirarme al espejo i lavarme la cara han ido en aumento.

Pero, que temperatura hacia? Os preguntareis.

No tengo ni la más remota idea. Pero estoy segura que no hacia tanto calor como en pleno verano y aún así lo he notado más indeseable que los peores días abrasadores.

Supongo que ya me había acostumbrado al frío.


Siempre en tu mente
Coraline

viernes, 18 de septiembre de 2009

Mi cochecito

Quiero pensar que el mundo no está en mi contra... pero... mi coche ha muerto... o casi. Tenía la necesidad de contarse-lo a alguien así que he llamado a Marga que aún está en tierra italiana probando suerte pero no ha respondido, así que he decidido plasmar mis inquietudes en este blog.
Diría que he llevado el coche al mecánico... pero puesto que no arrancaba, he llevado al mecánico hasta el coche i básicamente, me ha dicho que poco se podía hacer. Así que me tengo que despedir? Me siento como Marshall de cómo conocí a vuestra madre en el capitulo en el que tiene que decidir si hacer una reparación carísima de su fiero o dejarlo morir antes de llegar a los 200.000. La diferencia? Mi pequeño cochecito no ha tenido una vida tan larga i feliz i nunca nadie ha jugado a “perro a la vista” montado en él. No ha tenido la oportunidad de ser especial para nadie más que para mí.
Está clarísimo que no puedo pagar la reparación pero tampoco puedo comprar otro coche... así que... ser o no ser... that’s the question...
Mi parte sensata me dice que no necesito el coche para nada en Barcelona. Tal como dice Barney (vuelvo a nombrar como conocí a vuestra madre) para que necesito saber conducir en Nueva York? (pues lo mismo digo yo de Barcelona). Pero mi parte sensata queda aplacada por la parte de mi que se niega: y que hago ahora con la plaza de parking que estoy pagando?
Le he preguntado a Sam, mi pececito i creo que tampoco sabe que hacer porque me ha mirado con sus ojitos redondos y ha dejado ir dos burbujitas.




Siempre en tu mente
Coraline

lunes, 14 de septiembre de 2009

De vuelta

Apenas no he tenido tiempo de encender el ordenador estos días. Son las nueve y media i llevo un día de aeropuerto-avión-aeropuerto y la verdad es que estoy agotada. Acabo de llegar a casa. Este fin de semana no he parado ni un segundo.

Héctor y yo nos alojamos en el mismo hotel que el objetivo y puedo decir que no era precisamente modesto. Entramos por separado para poder tener nuestras habitaciones separadas sin llamar la atención (que alivio). Y tuvimos al objetivo bien vigilado... bueno... era Héctor quien lo tenía vigilado, y la verdad es que no sé cómo. Llamaba a mi puerta cuando menos lo esperaba i me decía que preparara mi cámara. Me tenía que dar prisa, porque Héctor no sabía con demasiada antelación cuando saldría el objetivo. Eso me llevó a preparar ropa justo cuando volvía a la habitación para podérmela poner rápidamente.

A parte de las prisas, del estrés y que este seguimiento me ha ocupado todas las horas del día... ha sido increíble! Nunca había hecho un seguimiento fuera de Barcelona y nunca me lo había pasado tan bien. Aunque tengo que reconocer que Barcelona es mi terreno de juego. Aunque me encuentre en una calle desconocida la ciudad es la misma, el ambiente. En la ciudad en la que fuimos a parar perdí a Héctor varias veces y solo nos manteníamos unidos porque los dos seguíamos al objetivo, lo veíamos, aunque no nos viéramos entre nosotros.

Al volver me he sentido bien. La temperatura ha bajado desde que me fui, además lloviznaba fuera del aeropuerto y sentí que volvía a casa.

Ha sido una gran experiencia i creo que conozco algo más a Héctor. Hemos desayunado, comido y cenado juntos. Aunque muchas veces no tenia apetito y se limitaba a mirar como comía yo... cosa bastante molesta... pero el hecho es que hemos hablado algo más de lo habitual. Ahora él sabe de mi que tengo un pez llamado Sam y yo sé de él... que le gusta trabajar. Recuerdo que me dijo que siempre había querido tener un perro... qué triste no?... y algo sobre sus estudios y tal... cosas relacionadas con el trabajo sobretodo.




Siempre en tu mente

Coraline

sábado, 12 de septiembre de 2009

Suspendida en el aire

No puedo creer estar en un avión! La verdad es que estoy muy emocionada, al fin y al cabo mi trabajo no es tan aburrido no? Os diré la verdad, no se si puedo tener encendido el portátil pero no me importa mucho porque, lo confieso, aún falta bastante para que despegue el avión así que...

Hemos estado siguiendo al objetivo por el aeropuerto, y yo ya me estaba oliendo un viaje por aire pero he intentado no emocionarme por si acaso. Héctor ya tenía comprados los billetes así que sabía perfectamente que el objetivo cogería el avión y también sabia donde iría. Igualmente lo hemos seguido por el aeropuerto, porque? Supongo que por si se escapaba (¡¿pero a quien estamos siguiendo?!). El objetivo está en primera clase, seguramente con todas las comodidades que a nosotros nos faltan pero da igual porque esto es muy cómodo i tengo una mesita. Héctor está a mi lado pero tiene un periódico cubriéndolo casi por completo, es como si un gran biombo nos separara, casi no me habla... supongo que para que no nos relacionen?

Venga hombre! Si estamos sentados juntos y hemos entrado juntos! Héctor tendría que aprender algo de discreción, tanto que me dice a mi... La verdad es que tengo la sensación de que en cualquier momento bajará el periódico y mirará la pantalla. Entonces me pillará, verá que tengo un blog y me despedirá... pero de momento no lo ha hecho, sigue pasando hojas lentamente, absorto en su lectura, casi inmóvil, como si no estuviera aquí. Me gustaría darle un manotazo al periódico, descubrir a Héctor a ver si realmente está leyendo o si esta con la mirada perdida pensando... es tentador... tentador... tentador...

Me he quedado embobada pensando en eso... mejor no lo hago que me metería en problemas además, Héctor me intimida, mejor que esté en sus cosas y así yo puedo estar en las mías.
Ya contaré, si puedo, más. Gracias por leer.



Siempre en tu mente
Coraline

miércoles, 9 de septiembre de 2009

Que veo en el horizonte?

Shalalala

–Prepara una maleta para cuatro días Coraline.

¿Cual seria vuestra respuesta a esto? La mía ha sido:

–¿Solo una?

Me he arrepentido solo decirlo... es un poco patético pero es lo que se me ha pasado por la cabeza. No he pensado en nada más… luego, al ver la cara de Héctor he procesado la información.
¡Un seguimiento! ¡A lo grande! ¡Cuatro días!

–Quizá solo sean dos días, es por si se alarga –me ha dicho finalmente Héctor impasible.
¿Como es que no le hace ilusión? ¿Son como unas vacaciones no? A saber… con Héctor… viajar con Héctor… vale, me esta entrando el miedo y… ¿donde dormiremos? ¡Dios! ¿Iremos en coche? ¿Ooooo en un autobús maloliente?

Después de la despedida, no despedida de Marga de la que no os hablaré (creo que no va a durar allí), estoy emocionada al hacer algo emocionante yo también. Ver mundoooo. Estoy súper ansiosa por saber donde iremos, aunque este tipo de cosas siempre se acaban torciendo.
Al menos Héctor ha tenido la delicadeza de decirme lo de las maletas a tres días del viaje. ¿Tres días? ¡Es muy poco!

Pero seamos sinceros, todo el mundo sabe que no haré las maletas hasta el último momento así que… ¿que importa?

Si puedo os prometo que durante el viaje actualizaré. A no ser que vaya en avión, entonces… creo que no se puede.


Siempre en tu mente
Coraline

sábado, 5 de septiembre de 2009

Donde està la sal?

Vale, la fiesta se descartó. Para llenar el vacío i despedir a Marga, YO haré una cena y todo vendrán a MI casa.

No es que esté enfadada... solo que siempre es mi casa la elegida para todo y... seremos unos quince... madre mía... suerte que no es una fiesta verdad?

Aunque... no los puedo culpar todo el mundo cree que mi casa es genial... y de hecho lo es! Y me castigan con esto! Además, Laura y Adam se han comprometido a ayudarme, pero no los veo por ninguna parte y tengo que empezar a ponerme manos a la obra.

Una cena para despedir a Marga... ayer ya decidí lo que iba a cocinar i compré los ingredientes... la ultima cena! La primera y última vez que cocinaré para ella (es la verdad), porque ella tiene.... tenía la mala costumbre de prepararme ella las comidas. Es un genio cocinando y se me hace extraño cocinar para ella sabiendo que ella lo haría mucho mejor.

Por otra parte este fin de semana será el doble de largo para mi, así podré ir a despedir a Marga al aeropuerto. Héctor me dijo que me necesitaba el fin de semana que viene y... sorpresa! Estas son las vacaciones! Dos días... para suplir otros dos. Aún no me ha dicho para que me necesita el fin de semana que viene pero me ha dicho que no haga planes de ningún tipo. Tendré que estar disponible las 24h i se podrá alargar durante la semana siguiente (que misteeerio) y que si es así que me darà más días libres además de... evidentemente pagarme más por eso...

Creo que tiene que ver con el objetivo... interesante.


Siempre en tu mente

Coraline

miércoles, 2 de septiembre de 2009

Adormecida

Estoy muy cansada de estar mirando a un ordenador durante horas, sentada en un pequeño cubículo, cabeceando de sueño...
Ayer no podía dormir y hoy estoy notando las consecuencias. No me puedo mover! estoy pegadísima a la silla (que por cierto es dura) con ganas de levantarme para... vale... para tumbarme en mi sofá y mirar otra pantalla, la de la tele.

Hoy básicamente he hecho trabajo de oficina pero he estado pensando y fantaseando en el objetivo que tenemos entre manos. Tengo muchas ganas de que nos pongamos a la acción y por lo que he oído... creo que Héctor me dará vacaciones porque si (que miedo me da... sus razones tendrá... y no tienen pinta de ser buenas) dentro de poquito.

Por otra parte... Marga se va el lunes pero creo que eso ya lo he superado... si, es muy pronto. pero tengo la teoría que es una fase, la de aceptación después me deprimiré y esas cosas... pero tenemos que aguantar, verdad? El lunes… madre mía… este fin de semana haremos una fiesta de despedida!
Siempre en tu mente
Coraline

lunes, 31 de agosto de 2009

Seguimiento en coche!!!

Ya sé que es raro, pero nunca había participado en un seguimiento en coche. Son más caros y los clientes los evitan. Simplemente nos dicen donde va a estar el objetivo a una hora determinada y van andando o en transporte público (sobre todo en Barcelona). Por lo general si el objetivo se sube a un coche particular abandonamos porque el cliente no tiene pensado pagar más, es así.

Hoy pensaba que iba a pasar eso. Estábamos siguiendo a un tipo realmente aburrido, no daré más detalles, pero casi ya no sabía a qué hacer fotos, aunque las hacia porque Héctor siempre dice que haga fotos a todo, que todo puede ser importante. De repente el hombre aburrido se para delante de un coche y saca unas llaves. Y yo pensando: aquí nos vamos. Pero Héctor me dice: vamos! Se ha puesto a correr y lo he seguido sin entender muy bien.

Se ve que el cliente ya le había dicho que el objetivo iría en coche y Héctor lo tenía aparcado en la zona de seguimiento. Al principio nos pensábamos que lo habíamos perdido pero, yuju! Lo hemos podido seguir. No diré hasta donde pero... estoy muy emocionada.

Contaré los progresos, este objetivo es súper interesante.


Siempre en tu mente
Coraline

sábado, 29 de agosto de 2009

La ultima comida

Hoy he ido a casa de Marga. Aun está con su plan de fugarse a Italia, de hecho, cuando he llegado allí he intentado hacer caso omiso a la maleta a medio hacer que había en el suelo.

Estaba muy entusiasmada y me ha repetido muchas veces que no tenía por qué preocuparme i que no se iba a olvidar de mi. Yo le he dicho que claro que lo va a hacer i le he vuelto a preguntar que iba a hacer yo sin ella. Es mi mejor amiga! Ojalá se conformara con la vida que lleva, que por cierto no está nada mal.

Ha preparado la comida y no he podido evitar pensar que sería la última vez que cocinaba para mí. Estaba muy triste y creo que no he sabido disimularlo demasiado. Ya sé que soy egoísta... pero no se actuar de otra forma. Espero que si al final no se va (cosa bastante improbable) no me odie por desear tan fervientemente que se quedara. Aunque que conté que no le he puesto baches en la huida. No le he pedido abiertamente que no vaya ni nada por el estilo solo le he dicho la verdad, que me hace penita que se vaya. Pero en realidad es mayorcita para tomar sus decisiones i no puedo ni quiero (aunque...) evitar que se vaya. Quiero que se dé cuenta sola y que su decisión sea quedarse... Se que no parezco muy convincente.



Siempre en tu mente
Coraline